Heraldo de Aragón, 6 de agosto de 2000

Sonora marcha por Biscarrués

RUBÉN DARÍO NÚÑEZ Huesca

Hacer sonar una campana que desde Huesca se oiga en todo Aragón, tal y como hizo hace ocho siglos Ramiro el Monje, es el objetivo que la Coordinadora de Biscarrués-Mallos de Riglos perseguía con la celebración de una marcha a pie desde Erés hasta Huesca. Han sido dos días en los que han recorrido 40 kilómetros a base de relevos entre las casi 50 personas, de las más de 200 que tomaron en un principio la salida, que han logrado alcanzar la capital a pie. «La idea no era hacer una marcha masiva en el itinerario, sino ir haciendo relevos para transportar la campana. Queríamos que hubiese gente en la salida y en la llegada, y lo hemos conseguido», declaró Luisa de Haro, miembro de la Coordinadora y concejala del Ayuntamiento de Biscarrués.

Con esta iniciativa, los vecinos de la Galliguera pretenden imitar al rey Ramiro II el Monje, quien anunció en su día que iba a hacer una campana que se oyera en todo el Reino de Aragón, algo impensable. Sin embargo, pasado el tiempo, mostró la campana formada por las cabezas de los nobles que habían conspirado contra él y la del jefe de la revuelta haciendo de badajo. La Coordinadora representó a las 21,00 horas una obra de teatro en la que simulaban un juicio sumarísimo y un verdugo «cortó las cabezas» de los responsables institucionales que han apoyado el proyecto del embalse, entre los que se estaban el Ministerio de Medio Ambiente, la Confederación Hidrográfica, las hidroeléctricas y la DGA.

También participó en la marcha José Antonio Sarasa, alcalde de Ayerbe, quien a su llegada a Cillas, donde todos disfrutaron de una agradable comida antes de dirigirse hacia Huesca, se mostró «un poco cansado pero con muchos ánimos. Además, ha sido emocionante el ver la solidaridad de toda la gente que nos ha visto pasar. Los pueblos por los que hemos pasado tocaban las campanas cuando nos veían llegar y también ha habido gente que se ha unido, gente en bici o que pasaba con el coche. Se agradecen todos estos ánimos porque la lucha que llevamos dura ya mucho tiempo».

La principal reivindicación de la Coordinadora es que «somos una minoría, pero somos la principal parte afectada y aquí nadie nos quiere escuchar. Todo el mundo tiene derecho a hablar y a decidir menos nosotros que somos los verdadero afectados», según declaró Luisa de Haro. Además, denuncian que con la construcción del pantano de Biscarrués se va a inundar el pueblo de Erés y va a acabar con una economía que está en pleno crecimiento gracias al turismo que se acerca a la zona para disfrutar de los deportes de aventura en el río Gállego. Con respecto a este tema, José Antonio Sarasa expresó su indignación por el hecho de que «Marcelino Iglesias, en su discurso de investidura, afirmó que iba a haber diálogo y que no se iba a construir ningún pantano que inundara un pueblo. Estoy seguro de que tiene muchas presiones pero tiene que ser más honrado y decir por qué no ha cumplido sus promesas».

El alcalde de Ayerbe manifestó sin embargo su apoyo al Pacto del Agua, «dentro del cual está previsto construir 32 pantanos, 28 de los cuales no son problemáticos. Sólo pedimos que se establezca una moratoria de 3, 4 ó 5 años para los cuatro pantanos como el de Biscarrués donde hay problemas». Además, también apoyó a los regantes y aclaró que su deseo hubiese sido que se invirtiera el dinero de estas grandes infraestructuras en modernizar los regadíos. «El pantano no va a servir para los Monegros, sino para trasvasar agua a las industrias de Valencia y Murcia y para llenar los bolsillos de mucha gente», concluyó Luisa de Haro.

La marcha comenzó el viernes a las 18,00 en Erés donde los vecinos bajaron la campana e iniciaron su transporte hacia Huesca. Así, en dos días han atravesado los pueblos de Biscarrués, Ayerbe, Los Corrales, Quinzano, Plasencia del Monte, Esquedas, Alerre y la ermita de Cillas, para llegar a Huesca a las 20,00 y desfilar por las calles del centro.

 

Asociación Río Aragón