Numerosos restos
humanos han salido a la superficie junto a las aguas termales del
antiguo Balneario de Tiermas con el estiaje del embalse de Yesa,
en lo que se supone que constituyó una necrópolis medieval
asociada al Camino de Santiago. Los restos se encuentran junto a
las ruinas de lo que fue la ermita del Pilar, igualmente asociada
a la Ruta Jacobea, que discurría por este lugar, como prueba el
puente románico que ocultan las aguas del embalse.
JACA.- Fue un
visitante de los que suelen acudir en esta época del año a
aprovechar las aguas de las antiguas termas el que alertó a varios
vecinos de la zona sobre la existencia de huesos humanos. Quienes
se desplazaron al lugar se encontraron con que los restos eran
numerosos, pero en los últimos días han comprobado cómo algunos,
sobre todo cráneos, habían desaparecido, presumiblemente por la
acción de los furtivos, aunque sobre el lodo prensado quedan los
huecos redondos.
ESTADO DE
ABANDONO
Estos mismos
vecinos denuncian el estado de abandono en que la administración
autonómica tiene a esta zona y su falta de interés por una riqueza
patrimonial y turística de envergadura, como la de las aguas
termales, que sólo se pueden utilizar, y con el riesgo de hacerlo
en medio de ruinas, cuando el embalse está bajo. Por una
iniciativa particular se ha delimitado el lugar de los
enterramientos con cintas de colores rojos y blancos. La
dispersión de los restos, y la existencia de éstos directamente
sobre la tierra, sin piedras de sepultura, hace complicado su
control.
Antiguos
vecinos de Tiermas preguntados al respecto no tienen constancia de
que hubiera un cementerio, pero sí han recordado la existencia de
la ermita, y que era utilizada para oír la misa dominical por
parte de quienes acudían al Balneario. Se trata de un templo de
una sola nave -de la que se ve una apertura en el lateral norte-,
que perteneció a la parroquia de Tiermas, pueblo fundado en 1201
por Pedro II de Aragón en una zona de cuya actividad hay
constancia al menos desde época romana La ermita pudo tener un
cementerio al lado, algo habitual, y por la extensión de los
restos aparecidos, el poblado al que perteneció tendría su
importancia. Posiblemente el cementerio se utilizó hasta los
siglos XVII o XVIII.
Luisa PUEYO |