Luisa PUEYO
JACA.- El alcalde de Artieda, Luis Solana, califica de “buena
noticia en el séptimo aniversario de la manifestación de los
paraguas” la fijación para el 6 de marzo del inicio del juicio
contra ex altos cargos responsables del proyecto de
recrecimiento del embalse de Yesa, aunque la comunicación del
Juzgado madrileño todavía no ha llegado al Consistorio
artiedano. “Habíamos recibido un escrito con la propuesta de las
fechas en principio disponibles, que eran del 6 al 9, del 13 al
16 y del 20 al 24, es decir, 13 días de vista, y estábamos
pendientes de la confirmación, que esperamos que llegue esta
misma semana”, explicó ayer.
Se mostró “convencido” de que la sentencia será condenatoria y
supondrá “la nulidad del proyecto y, por tanto, de cualquier
modificado sobre el mismo”, y recordó que el Tribunal Supremo
“nos concedió en su día la prejudicialidad penal que
solicitamos, de manera que a continuación pueden venir en
cascada varias sentencias de nulidad”. “Este juicio va a ser
decisivo y definitivo para el futuro del proyecto, que quedará
anulado”, afirmó.
Aseguró asimismo que “este Ayuntamiento está dispuesto a llevar
a los tribunales a quienes sigan el mismo camino que sus
antecesores, como en su día hizo con la querella criminal por
prevaricación contra tres ex altos cargos, ampliada por la
Fiscalía a otros tres responsables del proyecto por indicios de
delitos igualmente graves”. En este sentido, indicó que con el
juicio “cambia la situación de las obras. Esperamos que la vista
sea rápida, y la sentencia, también, y la mínima prudencia
exigiría la paralización de los trabajos. Es difícil explicar
por qué continúan, si el proyecto lo va a cuestionar un
tribunal, y con imputaciones muy graves”.
El alcalde indicó que se juzga a integrantes del gobierno del PP,
pero con el PSOE nada ha cambiado, ya que “la Comisión del Agua
fue una oportunidad perdida y las expectativas que teníamos en
el nuevo Ministerio de Medio Ambiente pasaron a ser una
decepción. Una sentencia condenatoria deberá suponer un
planteamiento nuevo para dar salida a las demandas de los
regantes de Bardenas dentro de la Directiva Marco del agua de la
unión Europea”. Para Solana queda claro que el conflicto de Yesa
“sigue vivo” y que en realidad la Comisión del Agua no trajo
ningún avance “porque sólo participaron los que estaban de
acuerdo, mientras que se despreció a científicos, ecologistas y
la mayor parte de los directamente afectados. Se pretendió
correr un velo y aparentar que se cerraba el caso, pero fue un
cierre en falso. También se obvió la situación judicial, de la
que no se quería hablar, y que ahora pondrá las cosas en su
sitio”.
Desde la Asociación Río Aragón la valoración va en parecidos
términos, y se insiste en que “los delitos que se imputan son
muy graves y están perfectamente documentados y probados por la
acusación que ejercen el Ayuntamiento de Artieda y la Fiscalía
de Medio Ambiente”, y que la condena, “aparte de afectar a
personas concretas, dará un cambio de rumbo al proyecto, que
quedará anulado”.
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