Opinión
Heraldo de Aragón, 5-IV-2002
Regreso al país del NODO

(Artículo sobre la manifestación de Ejea)

M.ª Victoria Trigo. COAGRET-Ebro Vivo

El domingo tendrán los nostálgicos oportunidad de revivir los tiempos en que la España hambrienta de los planes de desarrollo, preludiaba las películas en aquellas imágenes en blanco y negro en que la buena gente de jornadas de sol a sol y silencio grabado a fuego, aplaudía medallas de cuyo fulgor ordeñaba la esperanza y la resignación para continuar humillada, rodilla en tierra a la espera del milagro siempre por llegar.

Veremos pedir agua, agua a toda costa y a toda acequia, agua de donde sea y como sea, agua con y contra quien sea. Y a eso le llamarán futuro, prosperidad, legítimo derecho a crecer. Y los nuevos Marshall que hayan apiñado tanta sed reivindicativa, insistirán en la imperiosa necesidad de mantener reservas estratégicas de agua, prometiendo regadío a granel, tapices de untuoso verde en Bardenas y Monegros, chapoteo de arroz en el desierto, Terra Mítica de porrón.

Y sólo faltará un grupo de coros y danzas, de aquellos de tipismo enjaulado estilo Marisol, para dar el puntazo final a la escena: Ejea manifestándose el próximo día 7 de Abril a favor del Pacto del Agua, con unos cuantos líderes parodiando el aragonesismo y otros mareando al jefe de Madrid que, el pobre, anda preocupado porque ahora, tras la coctelera hidrológica Bruselas light continúa sin acortar distancias con el partido en el poder.

Desde el Mediterráneo, en un alto en las roturaciones para beberse el caudal soñado, se sumarán a la fiesta gratuita de este penoso resquicio de la España que prefiere seguir engañada y los más ilusos manifestantes volverán a casa emocionados tarareando la canción en honor a los americanos que, a pesar de ser recibidos con alegría y con la ropa de las grandes ocasiones, pasaban de largo sin detenerse en la estación de aquellos ignorantes de la posguerra de leche en polvo y cartilla de racionamiento. Mientras, Jaume Matas, divertido por el espectáculo en sepia de Ejea, a la vez que incómodo por el foco insurrecto de Artieda cimentado sobre la Nueva Cultura del Agua, buscará en su caja fuerte la llave de la tajadera de Yesa y se preguntará si podrá por fin utilizarla algún día.

Asociación Río Aragón-COAGRET