Diario del Alto Aragón, martes 12 de septiembre de 2000

Belén BOLOQUI, presidenta de APUDEPA

"El poder utiliza subterfugios para beneficiar a unos pocos"

Belén Boloqui, presidenta de APUDEPA (Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés), insta a continuar la lucha contra el recrecimiento de Yesa porque "tenemos argumentos por todos los lados " y el bien social de que se habla para realizar esta obra no es sino un subterfugio del poder para beneficiar a unos pocos. Uno de los argumentos en contra más importantes es e! referido a la obligación legal de conservar el Camino de Santiago.


JACA.-Belén Boloqui, doctora en Historia del Arte, participó la semana pasada en las jornadas de la Asociación Río Aragón contra el recrecimiento de Yesa, realizadas en Jaca. La presidenta de APUDEPA habló de la amenaza sobre el Camino de Santiago que implica el recrecimiento del pantano, pero instó a continuar luchando y argumentando: "Hay que reaccionar porque toda la legislación, la aragonesa, la española y la europea, que España está suscribiendo, obliga a proteger el Camino por ser Patrimonio de la Humanidad, que es el no va más del reconocimiento al patrimonio cultural, pero también por tratarse del Primer Itinerario Europeo, ser patrimonio natural y, en el caso de nuestra comunidad, ser consustancial al reino de Aragón".

"Quisimos sumarnos a los pueblos afectados y elaboramos un expediente que trasladamos al Gobieno de Aragón, que no ha contestado, al Justicia, que ha dicho que no puede intervenir por tratarse de un caso de interés general, y a la Unión Europea, donde con 28 documentos se hizo ver que estamos ante el atropello de un espacio que ya ha sufrido muchísimo", explica. A la denuncia presentada el pasado 4 de noviembre contra el Estado español, que ha de resolverse en el plazo de un año, se añadió en junio la documentación referida a las declaraciones del ingeniero de la actual presa, René Petit, a quien "le darla mucho miedo recrecer Yesa".

"Cuando te acercas a estos lugares, sientes el expolio, las casas abandonadas, los tejados agujereados, en ruina lo que tanto cuesta fabricar, por unas voluntades que muchas veces no llegan al objetivo del bien social. Los altos poderes se sirven de subterfugios paro llevar a cabo planes que benefician a unos pocos", señala, y añade que Aragón sabe mucho de esto en materia de agua. Falta sensibilidad y no se aplican los criterios intemacionales.

La UE no tiene legislación en materia de patrimonio, pero sí el Consejo de Europa, con su carta sobre la protección de la arquitectura vernacular. "No se puede uniformar todo, como en las ciudades. Cada pueblo debe guardar su esencia, pero parece que los aragoneses somos bastante olvidadizos con nuestras esencias, y esto se ve claramente en lo poco que valoramos el Camino de Santiago, una ruta bellísima que arrastra gente y permite un desarrollo sostenible, y que además fue algo consustancial del Reino de Aragón.